La cercanía con la naturaleza marca nuestras acciones

La sostenibilidad es una tradición viva de Hahnemühle y ha definido la historia de la empresa durante más de cuatro siglos. El motivo para la ubicación de la fábrica de papel en 1584 sigue siendo válido hasta hoy: Hahnemühle produce papel con agua pura de manantial. Recientemente, debido a todas sus medidas de sostenibilidad y sus acciones protectoras del medio ambiente, Hahnemühle ha recibido la certificación de gestión medioambiental de acuerdo a las normas ISO 14001. Se trata de un paso importante hacia el compromiso de Hahnemühle con un futuro neutro en carbono.

Las diferentes medidas de Hahnemühle para una mayor sostenibilidad:

La fábrica de papel utiliza agua pura de manantial desde el año 1584

El único centro de producción de Hahnemühle está situado en una zona protegida al pie del bosque Solling. Por ello, la producción de papel es compatible con el medio ambiente, o sea sostenible y estrictamente controlada. Después de la producción, solamente el agua pura de manantial sin que contenga ningún producto químico de limpieza, biocidas o conservantes, se vierte en el cercano río Ilme.

 

Celulosa y alternativas a la celulosa utilizadas por Hahnemühle

Cuanto más tiempo puedan crecer los árboles, más CO2 se ligará. Para los papeles de Hahnemühle solo se utiliza celulosa procedente de plantaciones de árboles sostenibles. Tampoco se destruye la selva tropical en Sudamérica. Por ejemplo, la celulosa del eucalipto se gana unicamente de plantaciones certificadas. Las fibras de algodón utilizadas por Hahnemühle son fibras muy finas (linters) que se adhieren a las semillas de la planta de algodón y son un subproducto de la industria textil y del petróleo.

 

Los papeles sostenibles de Hahnemühle forman la amplia gama Natural Line

Desde el año 2008 Hahnemühle produce papeles de alta calidad para obras de arte a partir de fibras innovadoras y rápidamente renovables. El papel Bamboo de Hahnemühle sigue siendo el pionero. Hoy en día, también se produce papel de cáñamo y de fibras de agave y Sugar Cane (caña de azúcar) así como el papel de cáñamo, imprimible digitalmente, para libros y folletos. Todas estas fibras crecen rápidamente, no necesitan pesticidas y requieren poca agua para su cultivo.

 

Los papeles de Hahnemühle son extremadamente resistentes al envejecimiento

Todos los papeles de Hahnemühle cumplen los elevados requisitos de la norma ISO 16245 en cuanto a la resistencia al envejecimiento y a la sensibilidad lumínica. Considerando las condiciones ambientales de los museos y los materiales artísticos altamente resistentes a la luz y libres de ácido utilizados, las obras de arte sobre papeles de Hahnemühle durarán cientos de años.

 

Todos los papeles de Hahnemühle son veganos

Ya en el año 1965, Hahnemühle fue el primer y único fabricante de papeles veganos expresamente para artistas y, desde entonces, ha prescindido de colas animales u otros componentes de origen animal en sus papeles.

 

El reciclaje en el ciclo de producción

Los residuos de producción y los recortes se devuelven al ciclo de producción o, al no ser posible, se transfieren a otros procesadores. Hahnemühle siempre da preferencia a los materiales reciclados cuando se pueden utilizar sin comprometer la calidad de los papeles de primera calidad, por ejemplo para los tubos de cartón para los papeles en bobinas y los cartones de embalaje.

 

Las fuentes de energía son 100% renovables para la producción de papel

Hahnemühle utiliza para la producción de papel únicamente energía eólica, hidráulica y solar. El consumo completo se analiza, evalúa y se reduce constantemente. En la actualidad, el pequeño parque automovilístico es optimizado usando tracciones alternativas.

 

Como fabricante de papel certificado según ISO 14001 por su gestión medioambiental

Hace poco, Hahnemühle ha recibido la certificación de Gestión Medioambiental por las medidas de sostenibilidad y acciones conscientes para el medio ambiente de acuerdo con la norma ISO 14001. Esto forma parte de la estrategia de Hahnemühle para un futuro neutro desde el punto de vista climático. 

 

Con Green Rooster Hahnemühle apoya la sostenibilidad a nivel mundial

El gallo rojo es la conocida marca de Hahnemühle. Con la iniciativa Green Rooster (gallo verde), la empresa apoya proyectos sociales y de protección del medio ambiente a escala regional, nacional e internacional. Con programas de reforestación, protección de especies y educación, Hahnemühle protege activamente el medio ambiente y el clima y cumple con su responsabilidad corporativa. Hahnemühle se guía por los 17 objetivos de sostenibilidad de las Naciones Unidas y el Gold Standard para proyectos de protección del medio ambiente.

 

Hahnemühle utiliza embalajes compatibles con el medio ambiente

Por ejemplo, el material de relleno de nuestras cajas de envío está compuesto por papel reciclado o por esferas hechas con almidón de maíz 100% compostable. Asimismo utilizamos cintas y cubiertas de albaranes de papel para reducir los envases de plástico.

 

Nuestros papeles se usan en más de 130 países

El centro logístico de Hahnemühle se encuentra en Göttingen, en el centro de Alemania. Nuestro proveedor de logística ha recibido un premio a la sostenibilidad y apoya nuestros esfuerzos de protección del clima. Agrupamos nuestros envíos con el fin de aprovechar al máximo nuestros medios de transporte y, en la medida de lo posible, usamos un transporte neutro para el clima. La mayoría de nuestros productos se transportan por barco o ferrocarril.

 

Producción de papel respetuosa con el medio ambiente para obtener la mejor calidad

Materias primas innovadoras, procesos que ahorran recursos y altos estándares sociales en la producción son valores clave y factores de éxito para Hahnemühle. La comprobación de la calidad de las materias primas y la realización de estrictos controles en la cadena de suministro y en el proceso de producción proporcionan la certeza de que el resultado final cumple los elevados estándares de Hahnemühle.  Hahnemühle ha sido certificada conforme a las directrices medioambientales y de calidad más exigentes mediante evaluaciones externas de sostenibilidad como EcoVadis o Sedex.